Prudencia...
Del latín prudentĭa, se define por la Real Academia Española (www.rae.es) como: Templanza, cautela, moderación. Sensatez, buen juicio. Y se menciona relativo a una de las cuatro virtudes cardinales, que consiste en discernir y distinguir lo que es bueno o malo, para seguirlo o huir de ello.
Esto no deja de tener importancia ya que esta virtud obliga a no perder de vista el por qué de la acción que se está realizando. Al no estar presente la prudencia, la virtud puede terminar siendo un fin.
Esto se puede entender de mejor forma, al ejemplificarla con la sinceridad:
Al ser sincero, sin prudencia, se puede llegar a un desenfreno verbal que dañe a terceras personas.
Cognitio rerum appetendarum, et fugiendarum.
El comienzo de una nueva etapa.... cerré un proceso de años... lo asumo y me encanta...
Junto a Tí, comienzo un nuevo proceso que me encanta... asi como me encantas Tú.
Estoy conciente, con los pies bien puestos en la tierra, y en lo más íntimo de mi ser, te confieso cosas que nunca he publicado en ninguna parte... Tu y Yo... juntos... estoy ahí... junto a Ti.
aDios!!
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